domingo, 10 de noviembre de 2013
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sentirán vértigo las cabras?
ResponderEliminarmuy guapa esta foto! los colores son bonitos.
ResponderEliminarun abrazo
Ese tiempo en el que se nos muestran los bosques como lugares de ensueño y aventuras en donde la verdad y la imaginación se entremezclan para crear un mundo diferente.
ResponderEliminarPreciosa.
Un abrazo
Para fabular y soñar.
ResponderEliminarSaludos.
como es una fábula no se si se creérmela o no. la señora muy tranquila, tanto que le da la espalda, la otra persona tambien y lo mismo la cabra guardando escrupulosamente las distancias, pero ¿Y el fotografo?
ResponderEliminarahora las pegas, lastima de cielo blanco, un poco mas de vegetación por aquella parte y voilá.
ya me voy recuperando de lo del otro dia. mañana, pasado y al otro tengo médicos. Supongo que no te dio tiempo de fotografiar los madriles con ese horario tan reducido.
fuerte abrazo amigo mio
Siguiendo las sabias sugerencias de Ripley, sustituyo la primera versión por otra con un procesado más cuidadoso con las luces altas y menos contrastado para que ahora luzca toda la vegetación tal como era. Por cierto, las personas que aparecen son mi mujer y mi hijo, mis espontáneos preferidos. ¿Y el fotógrafo? Efectivamente el fotógrafo parece estar ausente en esta foto, ignorado y por tanto libre para fotografiar. Esa es una de las razones por las que me atrae esta imagen, al margen de las fabulaciones que pueda encerrar y que con seguridad encierra.
Eliminarasi la veo mucho mejor. la encuentro mas natural, lo de la mujer y el niño que ya no lo es tanto y cuyo nombre no recuerdo pero que asocio a la Navidad, ya lo supuse, era tan obvio que para que mas ¿no te parece?
Eliminar¡ya me acordé del nombre!
Eliminarfábulas que viajan por los castañeros...
ResponderEliminarLove this photo . . .
ResponderEliminarthe kind of picture you love looking at.
Fabulosmente sugerente, los condicionantes técnicos hacen que la escala se vea tan alterada que efectivamente refuerza el carácter onírico, bien hecho.
ResponderEliminarUn abrazo.
En ese bosque encantado creo que pudiera pasar casi cualquier cosa. Bella y curiosa toma
ResponderEliminarUn abrazo Xuan
Pasear estos días por estos lugares es un autentico placer. El sábado me di un buen paseo entre castaños y robles, pero no tuve la suerte que tú, estaba demasiado soleado.
ResponderEliminarEnhorabuena por esta escena de fábula.
Un abrazo.
Parece sacado de la película El Laberinto del Fauno. Preciosa. Un abrazo.
ResponderEliminarMuy bucólica y onírica.
ResponderEliminarLa cabra (se ve enorme) parece ser la observadora, como si hubiera ido al monte a ver personas.
ResponderEliminarUn abrazo
Me gusta mucho, y me gustaría aún más sin el sujeto de rojo. Solo con la cabra y la figura que se aleja.
ResponderEliminarEn cualquier caso un buen trabajo.
Un abrazo
Por los bosques asturianos cualquier fábula se cree posible.
ResponderEliminarGran escena, como la de la entrada anterior (genial) no sé si será esto cosa de los animales, racionales o no, que van entrando en tus fotos. Y es algo que tienes que cultivar más, porque lo disfrutamos todos.
Si no me paro un rato, hubiera jurado que era un unicornio que te esperaba, Xuan, sabedor de tus dotes para la magia.
ResponderEliminarBesos, Merlín.
No sé si aquí habrá alguna fábula, lo que sí sé es que hay magia...Será casualidad, pero la cabra parece tener tres cuernos...jopé, a ver si es un tricornio... ¿Existen? A lo mejor en Asturies sí, eh, Xuan? je,je,je.
ResponderEliminarUna magnífica foto. Y cómo crecen algunoooosss...
Un fuerte abrazo.
Son varias las fotos que tienes con este tema de la fábula, de la leyenda, de los bosques que tienen un mundo propio, todas ellas muy sugerentes. Deberías plantearte una exposición, agrupándolas.
ResponderEliminare eu a pensar que já tinha comentado aqui... se calhara a cabra comeu o comentário que as cabras comem tudo menos as fábulas e as vidas que vivem por dentro das fábulas...
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