Ni tú eres la rama ni yo el tronco, ni somos de un palo tal que dé una astilla. Aún así, cuando tú renunciaste a la estrategia de la quietud y yo a la del desplazamiento fuimos los dos una misma concentrada extremidad, ese raro fruto de la intersección de los instantes.
jueves, 15 de agosto de 2013
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Interesante ejercicio de similitudes.
ResponderEliminarDicen los sabios zen "como e arriba, es abajo; como es lo grande, es lo pequeño"
Magnifica
Un abrazo
qué hermoso texto para una imágen bella!
ResponderEliminarqué grande es el instante de la confluencia...
ResponderEliminarNo hay grandeza que no haya sido infinitamente pequeña...
ResponderEliminarA veces los sueños, son tan reales que todo es posible.
Un abrazo
ResponderEliminarGran vista.
Tiro Sublime.
Un abrazo.
los bichos palo siempre me dieron miedo dsd pequeño, no asi las abejas y avispas a las que atraia con el agua de la manguera, daba un minusculo pisoton y al bote de los experimentos.
ResponderEliminarla foto está muy bien de todo, ni una pega.
abrazos
Es curioso cómo la confluencia, entendida como complicidad, puede encontrarse también en lo más remoto y hasta antagónico.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me gusta la textura y, extraño en ti, este virado, es una foto bonita. Esta mañana he cortado seis hojas de morera y las he introducido en el artefacto que mi hija, que sí está no solo de vacaciones sino también de veraneo, tiene para estos animales en su habitación. Por lo menos hay 30, tirando por lo bajo, de todos los tamaños.
ResponderEliminarUn abrazo
Solemos encontrarnos porque a fin de cuentas pertenecemos al mismo árbol de la vida.
ResponderEliminarSaludos.
Mientras haya sincronización de movimientos no es va mal la cosa.
ResponderEliminarTu nivel fotográfico va parejo con tu profundidad poético filosófica.
ResponderEliminarYa te lo he dicho otras veces, pero hoy me salió algo distinto.
Fabuloso.
Me parece una auténtica genialidad, tanto la imagen como el texto. ¿ te he dicho alguna vez que me encantan tus textos, XuanRata ?, seguro que si.
ResponderEliminarEnhorabuena.
Un fuerte abrazo.
Fascinante esa cualidad arbórea del brazo, ese tronco en el que se adivina la fortaleza de una raíz que se resolverá en pulgar y en cuya superficie el insecto intenta camaleonismos confusos.
ResponderEliminarExcelente composición. Muy buena toma.
ResponderEliminarSalu2
perfeita a camuflagem, quase não se percebe o braço...
ResponderEliminarb&n perfeito
abraço
Arraigado!
ResponderEliminarLa fotografía trata sobre todo de captar la intersección de instantes efimeros. Esa es su magia y su grandeza. Acertada la metáfora del brazo y el insecto con el tronco y la rama. Un saludo.
ResponderEliminarAlgo parecido a una esquina distinta donde un dios posible y benévolo propicia hermosos encuentros.
ResponderEliminarTú forma de decirlo es precisa.
Recién llegado del sur, y aun conmovido con su generoso despilfarro de luz, ten envío un abrazo enorme.
Que buena!!!! Me ha encantado. Un abrazo.
ResponderEliminarEl brazo parece un tronco que aloja al insecto, se camufla en él, una perfecta unión acentuada por ese magnífico b/n.
ResponderEliminarUn abrazo.