Siempre que viajamos lo hacemos al increíble país de las oportunidades.
La oportunidad de lo diferente, de la novedad, del descubrimiento maravilloso de las rutinas ajenas.
La oportunidad de hallar el tesoro con que alimentar el insaciable apetito de la memoria.
La oportunidad de lo auténtico, aun a sabiendas de que lo auténtico no es más que un arquetipo mil veces repetido y por lo demás falso.
La oportunidad, por qué no, del fracaso pues también el fracaso tiene derecho a una oportunidad.
Siempre la oportunidad, aunque sea con descuentos.
La oportunidad incluso de desaprovechar una oportunidad irrepetible.
La oportunidad del sueño de otra vida, y su renuncia.
La oportunidad de la despedida con su promesa de saudade.
Además de la impagable oportunidad de regresar algún día, para lo cual se requiere cumplimentar el trámite de haber estado antes.
Y como no, la oportunidad del relato, esa narración sin fin que empieza antes del viaje y continúa tras él, fijando los hitos y espejismos de otro viaje a través del viaje.
El viaje finalmente como una oportunidad para la disputa, cuando pasado un tiempo tu viaje, compañera, y el mío parezcan viajes diferentes, apenas salpicados de alguna coincidencia a la que habremos llegado más por voluntad de consenso que otra cosa. Y así hasta que todos nuestros viajes se conviertan en uno solo e indistinguible.
Ya sé, tenía que haberme comprado unos zapatos nuevos en aquella tienda tan simpática, tenía que haber pasado al otro lado del escaparate y haberme saltado nuestras particulares convenciones internacionales para sentirme vecino y no extranjero, pero entonces ¿cómo distinguiría el viaje del resto de mi vida? ¿cómo sabría que ahora estoy de vuelta, ese sentimiento que también forma parte del viaje?
Sí, ya sé lo que vas a decirme: que en el fondo me basta llevar la cámara encendida para viajar sin más al increíble país de las oportunidades. Y tal vez tengas razón.
Viajemos entonces. A qué estamos esperando.
Muy buena y bien vista la imagen y muy bueno tambien el texto, saludos amigo, un abrazo.
ResponderEliminarQué alegría me ha dado volver a verte y a leerte, Xuan Rata mi gran amigo.
ResponderEliminarPensaba que ya no volverías. Y ahora llegas y apareces con esa foto compuesta e inquietante que nos sugiere y nos obliga a mirarla para ver si es dentro o fuera. Qué es lo de dentro y qué lo de fuera. Una oportunidad de descubrirte.
Toda la vida es una oportunidad porque pienso la cantidad infinita de causas y casualidades que han tenido que ocurrir a lo largo de los siglos hasta que hemos llegado a este mundo.
Vivir es una oportunidad irrepetible.
Y el hecho de que estés aquí también.
¿Vienes para quedarte?
Un abrazo.
una foto excelente! me gustan especialmenteel encuadre y la mirada de la chica.
ResponderEliminarun abrazo
Buff! Cuanto tiempo. Me alegra enormemente que me des la oportunidad de disfrutar tus relatos visuales nuevamente.
ResponderEliminarSaludos Xuan.
Estupendo regreso, espero que el viaje haya sido fructífero y nos regales muchos viajes por tus imágenes y palabras. Besos
ResponderEliminarLo sabía, así que "hola" otra vez. Qué bien.
ResponderEliminarUn abrazo.
Xuan sabía que acertaba al no borrar el enlace a tu blog. Es la mejor noticia de este día en el que me encuentro tan cansando, pero tanto tanto que a la cama me iba cuando veo tu blog actualizado, la alegría es inmensa y me puede la impaciencia de modo que aparco por un momento el dolor de cabeza y te leo con el gusto de siempre, entonces se me ocurre que tal vez solo Sabina pudiera escribir como tu lo haces y quien sabe si hasta cantar esas palabras.
ResponderEliminarEs muy cierto todo lo que dices, incluso das en el centro de la diana cuando propones la respuesta que es justo lo que iba a escribir.
Además has rediseñado o por ser mas preciso le has lavado la cara al blog haciéndolo aparecer mas acorde con los tiempos modernos, ahora se ve mas bonito, claro y limpio, personalmente me resulta optimista en comparación con el antiguo mas oscuro, has tardado ocho años pero merece la pena el cambio, me gusta también la foto de cabecera, la inclusión de las páginas pero sobre todo el anuncio de una temporada nueva, ¡fantástico!. Eso nos indica continuidad, bienvenido a casa querido amigo, esto no es lo mismo sin tí.
La vida es un camino lleno de baches y trampas pero también de oportunidades mas o menos equilibrado aunque a veces el reparto no sea ni justo ni equitativo.
Un fortísimo abrazo
En la vida, los sueños no cumplidos esperan siempre su segunda oportunidad, aunque se presenten con el gesto condescendiente del fuera de temporada y pares sueltos y el 50% de su valor y el doble de su precio. Tu foto, por otro lado, ofrece la posibilidad de estar dentro y fuera, de ser reflejo o no, quién sabe, de ser observado por la niña desde el interior o desde el exterior, esos juegos: de ser la oportunidad de alguien o su aspirante… Un feliz saludo por la reanudación del calendario.
ResponderEliminarTMe faltaba tu hueco que ocupas en mí.
ResponderEliminarCon ese cariño que compartimos por lo paradójico, se me ocurre que esperar también puede ser una forma de viajar, o qué decir si no de esta espera mía que has recompensado con una nueva etapa de este viaje que desde hace tiempo, como el gusto por la paradoja, compartimos. Muchas gracias y un abrazo.
ResponderEliminarVaya, vaya, qué sorpresa, no tenía ni idea de que habías inaugurado la 3ª Temporada. Me has dado una alegría, sabes que soy muy fan tuyo y aunque te sigo por donde tú sabes, no es lo mismo que en el blog.
ResponderEliminarMe alegro mucho, Xuan, espero que todo esté bien.
Muchos ánimos en esta nueva etapa.
Abrazo.
Hay días de suerte. Hoy es uno de ellos.
ResponderEliminarMucho tiempo sin verte por aquí. Sería una pérdida irreparable no poder seguir disfrutando de tus entradas inteligentes. Muy buena tanto la foto como el texto.
ResponderEliminarMe alegro enormemente de que hayas emprendido este nuevo viaje.
ResponderEliminarHace tiempo, viaje a Ponte de Lima. Fué una gran oportunidad para disfrutar de ese maravilloso lugar, del que guardo muy gratos recuerdos.
Un fuerte abrazo, XuanRata.
Cualquier escena es una oportunidad. Solo hay que saber verla...
ResponderEliminarMe alegra mucho tu retorno.
Hacía tiempo que no entraba en tu saloncito. Tan fascinante como siempre.
ResponderEliminarlas oportunidades vienen por pares?
ResponderEliminar