Un mamut es igual que un elefante pero con pelo para que no se le congelen las orejas porque donde él vive hace mucho frío y por eso se llama la edad del hielo. Hoy también hace frío y tengo helados los dedos de los pies, pero no he visto ningún mamut por aquí. A lo mejor es que no hace bastante frío todavía.
Una señora dice que hay un mamut pintado en las paredes de la cueva pero que hoy no se puede ver porque es lunes. Yo creo que no se puede ver porque hay una reja en la entrada. Si no la hubiera podríamos entrar y verlo, aunque fuera lunes o cualquier otro día de la semana.
Una vez pinté una jirafa en la pared de mi habitación. Mi madre me dijo que aquello eran dos rayas nada más. Le expliqué que la jirafa tenía un cuello tan largo tan largo que la cabeza estaba en el piso de arriba. Pero no me creyó y tuve que borrar la jirafa con una goma que se deshacía, así que tuve que gastar muchas gomas. A lo mejor por eso hay una reja delante de la cueva, para que las madres no borren el mamut.
Esta mañana hemos estado en la playa y hacía sol. Estábamos tan ocupados jugando en la arena y saltando las olas que no hemos visto llegar las nubes. Mi padre dice que estaban detrás de las montañas, esperando su hora. Yo creo que las montañas no las dejaban pasar hasta que fueron tantas que ya no pudieron sujetarlas. Ahora todo está cubierto de nubes y son las montañas las que tienen que esperar para volver.
Cuando veníamos hacia la cueva he visto unos mechones de pelo muy largo muy largo colgando de las ramas de un árbol. Yo creo que al mamut no le importa que sea lunes o haya rejas y a lo mejor para verlo no tengo que esperar a que las orejas y los pies se me congelen del todo.
Una señora dice que hay un mamut pintado en las paredes de la cueva pero que hoy no se puede ver porque es lunes. Yo creo que no se puede ver porque hay una reja en la entrada. Si no la hubiera podríamos entrar y verlo, aunque fuera lunes o cualquier otro día de la semana.
Una vez pinté una jirafa en la pared de mi habitación. Mi madre me dijo que aquello eran dos rayas nada más. Le expliqué que la jirafa tenía un cuello tan largo tan largo que la cabeza estaba en el piso de arriba. Pero no me creyó y tuve que borrar la jirafa con una goma que se deshacía, así que tuve que gastar muchas gomas. A lo mejor por eso hay una reja delante de la cueva, para que las madres no borren el mamut.
Esta mañana hemos estado en la playa y hacía sol. Estábamos tan ocupados jugando en la arena y saltando las olas que no hemos visto llegar las nubes. Mi padre dice que estaban detrás de las montañas, esperando su hora. Yo creo que las montañas no las dejaban pasar hasta que fueron tantas que ya no pudieron sujetarlas. Ahora todo está cubierto de nubes y son las montañas las que tienen que esperar para volver.
Cuando veníamos hacia la cueva he visto unos mechones de pelo muy largo muy largo colgando de las ramas de un árbol. Yo creo que al mamut no le importa que sea lunes o haya rejas y a lo mejor para verlo no tengo que esperar a que las orejas y los pies se me congelen del todo.
Es la versión mejorada de su padre; idéntico pero sin tanto pelo...cómo el mamut
ResponderEliminarEl mamut es el padre del elefante y sin embargo por su aspecto parece más bien hijo suyo. La evolución es cambio pero no necesariamente avance. Solo nuestro gen optimista, fruto de la evolución, nos hace pensar lo contrario.
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ResponderEliminarMe encanta!
No sé si transcribes los razonamientos de tu hijo o si tú has inventado el texto. En cualquier caso, me encanta esa lógica-ilógica infantil. Lo disfruté muchísimo
Un beso
PD. Los mamuts se esconden detrás de los árboles
Mi hijo ya no tiene edad para estos razonamientos. Ahora su ilógica es otra. Pero la mirada de este niño me pareció muy elocuente. Solo tuve que escucharla.
EliminarParece que se trata de tu hijo. Pues me encanta esa sensación de pequeño "mamut" desvalido a punto de refugiarse en la cueva a la espera de que le crezca el pelo protector.
ResponderEliminarUn abrazo.
Aunque no es mi hijo supongo que de algún modo despertó al niño desvalido que siempre llevamos de la mano. Desvalido pero valiente.
EliminarNadie le pone rejas a un mamut y mucho menos a la imaginación, Rienda suelta a esos niños que llevamos dentro. Imaginación al poder!!!
ResponderEliminarHe estado revisando tus últimas entradas y es magnífico el gusto que tienes tanto en composición como en el uso del color. Que rabia no poder seguirte como te mereces. Puxa Asturies
ResponderEliminarQué bien sabes hilvanar tus textos con tus fotos.
ResponderEliminarMe ha encantado la historia, parece que has vuelto a la infancia, al contarla como si fueras un niño, ese niño que vemos en la foto, desvalido, muerto de frío y con esa mirada que lo dice todo.
Enhorabuena, "mostruo"
Abrazos.
La mirada de un niño puede crear mamuts y cualquier otro animal. En el fondo, Xuan, eres un niño.
ResponderEliminarBuena captura... Me encanta la actitud del niño
ResponderEliminarMetáfora precisa de la vida, con sus anhelos y olvidos.
ResponderEliminarQuerido Xuan, que sepas que soy un desastre absoluto; después de no conseguir durante un montón de días dejar un comentario en tu blog, y cuando toqueteando vete a saber qué lo consigo, te dejo aquí lo que quería decirte en la fotografía de la silla y los trofeos (por cierto, imagen y texto que me han gustado mucho). Creo que voy a empezar de nuevo con el servicio postal de correos.
ResponderEliminarAquí quería decirte que por esta vez he querido contemplar tu texto y leer tu fotografía y que en absoluto eso ha disminuido el placer de tu propuesta (ese texto, a mi precario entender, tiene un "swing" y una "Verdad/Proximidad" perfectas. Un abrazo, Xuan.
ResponderEliminarGracias a todos por vuestros comentarios. Fotografiar, escribir, son manifestaciones de nuestra capacidad y necesidad de juego, esa actividad que oscila entre la seriedad y la inocencia qué caracteriza a los niños. También hay quien lo llama arte, pero esa ya es otra liga.
ResponderEliminarJe, je, que bueno el texto, me ha recordado la película Forrest Gump por aquel mantra que soltaba siempre el protagonista de "Mi mama dice ..." y después soltar toda una serie de cosas desde la inocencia pero contando verdades absolutas. Por supuesto, si dibujas una girafa en la habitación, solo se verán dos rayas porque la cabeza del animal seguro que quedará en la habitación de arriba. En la foto desde luego sorprende el atuendo del niño que no parece apropiado en el lugar, pero seguro que esta cueva está cercana a una playa y tiene todo el sentido del mundo. Un abrazo.
ResponderEliminarJusto enfrente de la entrada de la cueva hay un rincón que recuerda a alguna playa paradisíaca de Tailandia.
EliminarHermoso texto. "Yo creo que las montañas no las dejaban pasar hasta que fueron tantas que ya no pudieron sujetarlas. Ahora todo está cubierto de nubes y son las montañas las que tienen que esperar para volver", me encantó.
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