Mediodía. Atravieso el tráfico y las calles como el que recorre una vieja trinchera en la retaguardia de una guerra olvidada. Entro en la cafetería y de un solo vistazo localizo mesa y periódico, pido, pago, me quito el abrigo. Tras haber llegado a un acuerdo equitativo entre el placer y la salud, vierto en el té o en el café la mitad exacta del sobrecito del azúcar. Tomo el primer sorbo de noticias. Mejor un poco más de azúcar. Levanto la vista: un paso de peatones y un semáforo delimitan un espacio donde la parada y el arranque se suceden a intervalos tan precisos como el émbolo de un mecanismo de combustión interna: tal vez el corazón de la ciudad está aquí precisamente, ardiendo sin descanso. Aquí, donde una mujer pasa sobre sus tacones sin tocar el suelo y un viejo mide sus pasos como si fueran los últimos. Aquí, donde el repartidor inventa alternativas al asfalto y un turista se detiene confuso buscando una correspondencia imposible. Veo también al hombre que se detiene delante de mi ventanal y atisba el interior para calibrar si hay alguna mesa libre, el hombre que tal vez viene de recorrer otra trinchera: los dos desviamos la mirada, él en busca de otro lugar no tan lleno y yo vaciando mi taza de té o de café. Me pongo el abrigo. Salgo a la calle.
Has captado el único rayo de sol de toda esa ciudad atrincherada por la sombra y con rehén y todo. Genial, a este paso los siguientes diez años se nos van a pasar en un suspiro. A seguir así captando instantes únicos.
ResponderEliminarJaja te pasa con el azúcar lo mismito que a mí.
ResponderEliminarEl mechón rubio no tenía gana ninguna de ir al lugar donde iba la cabellera.
Besitos
ResponderEliminarEntre la luz y la oscuridad me he quedado sin palabras. Prefiero engancharme a tu cintura y contemplar.
Qué bonito miras, Xuan.
Una fotografía callejera excelente y bastante original, veo que te mueves a la perfección en todos los terrenos. La originalidad la veo en unas líneas que me resultan muy resultonas y poco vistas, con una composición caída que ayuda muchísimo a la hora de potenciar la velocidad general de la foto que por otro lado es puro movimiento. El pelo de la chica al aire es la guinda de la foto, y la luz por supuesto. Quizás la veo un poco fuera de foco en la chica, pero es que ese tema es muy difícil en este tipo de fotografía, o al menos a mi me pasa mucho. Hago muchas fotos decentes en la calle pero suelen fallarme por tema de foco. En todo caso, la foto me gusta mucho. Un abrazo.
ResponderEliminarLa verdad es que no acabo de ver ese problema de foco que dices. Quizás el hecho de estar moviéndose le resta algo de nitidez pero es casi inapreciable. Por lo demás ya sabes el dicho: no dejemos que un pequeño problema de foco no estropee una buena foto ;-)
EliminarCierto, hoy viendo la foto desde el trabajo la foto me parece perfectamente enfocada. No se que me paso ayer en mi casa. Esto debe de ser fruto de repasar los blogs que sigo por la noche después de un largo día de trabajo y corretear con el niño de extraescolar en extraexcolar. Salí de casa a las 7 de la mañana y entre de nuevo a las 9 de la noche. Pero tienes razón, la foto la veo perfectamente enfocada.
EliminarPreciosa foto y la literatura a la que ha dado lugar.
ResponderEliminarMe encantan
Observación constante y detallada.
ResponderEliminarUn abrazo, XuanRata.
Me gusta mucho esta composición callejera, muy dinámica y "en caída libre". Desde luego, una manera de verlo muy propia del mediodía de la vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
Desde luego aprovechaste bien el café. La chica con melena al viento, al estilo del más puro anuncio, la imaginamos taconeando por la calle a paso ligero. Su sombra le acompaña, el sol es su aliado.
ResponderEliminarBuen finde.
Muy buena captura, parece como si la mujer se dispusiera a atravesar una puerta y un golpe de luz y viento le sorprendiera.
ResponderEliminarUn abrazo.
Que agradable sorpresa, ver una auténtica street en tu blog, quizás sea porqué visito poco :|
ResponderEliminarEs magnífica, luz, dinamismo, movimiento puro que nos muestra el paso y el cabello de la chica, pero que poténcias hábilmente y de forma excelente, mediante esta inclinación, que dicho de paso, la veo muy equilibrada por la pequeña porción de la luz del cielo de la derecha, y por el coche de la izquierda. En fin, que ha sido un placer poder contemplarla.
Un abrazo, Xuan.
A mí también me gusta.... Es buena, sí señor
ResponderEliminarEsta fotografía y el texto abren el día en dos, en efecto: energía y disposición. Presente absoluto y dinámico.
ResponderEliminarEsa mujer no camina, desfila.
ResponderEliminarY tu diestra mirada la ha encuadrado perfectamente en medio de la jungla de cemento antes de desaparecer en la oscuridad.
Un abrazo Xuan.
P.D: Me ha gustado el comentario de Lopillas, muy acertado e ingenioso.
Buena escena urbana. Tremendamente dinamica.
ResponderEliminarPara mí, lo más poderoso de la fotografía desde que la vi por vez primera, es la señal. No sé qué indicará pero no puedo dejar de recordar a un matasuegras.
ResponderEliminarYo, aunque sea más pegajosa, prefiero la miel cruda. Las noticias dulces se agradecen porque para cruda está ya la realidad que nos circunda.
Y otra cosa: la combinación de sol, viento y frío hacen que nuestra foto resulte muy ejecutable pues la luz desborda sobre las cosas.
Bss.
Efectivamente, estaba esperando que alguien señalara la señal: de hecho es uno de los elementos claves de la composición que gira en torno a cuatro puntos: la señal, el coche, la chica y el recuadro azul del cielo al fondo. Cuatro elementos que recogen la luz y forman un diamante duro como ese frío y esa luz del invierno que tanto me gustan.
EliminarNo estoy de acuerdo con tu interpretación, apreciado Xuan.
EliminarSi de esos cuatro elementos fundamentales eliminas tres, todos menos la chica, la imagen no cambiaría un ápice su sentido ni su aspecto compositivo.
Por lo cual son superfluos o innecesarios, en cualquier caso quizá inevitables en el momento fotográfico pero que no aportan a la imagen nada sustancial, quizá lo contrario si me apuras.
Dicho esto desde un punto de vista totalmente subjetivo, el mío propio, que naturalmente no tiene más valor que la lectura de otro espectador cualquiera, desde luego.
Un abrazo.
Indudablemente la mujer es el centro de atención de la imagen, pero yo pretendía captar algo más que la mujer. La fotografía urbana o callejera, tal y como yo la entiendo, refleja escenas donde varios elementos se relacionan, y no solo un objeto o persona en un contexto urbano. En esta foto en particular antes de la toma decidí incluir el semáforo con la señal y esperar a que alguien atravesara la tira de luz. Después en la imagen aparecen el coche (casual) y el rectángulo de cielo (en el que no había reparado). Valoré la posibilidad de recortar la foto para eliminar estos dos elementos pero me di cuenta que equilibraban la composición y sin ellos la foto perdía dinamismo. Y lo más importante: si los suprimía ya no estaba retratando la calle, que es lo que yo quería esta vez. Muchas gracias por tu comentario, que me permite reflexionar.
EliminarUn abrazo.
Hola Xuan, no, no se trata de recortar, sino lo que quería transmitir es que sin esos elementos, sin el coche, sin la señal y sin ese trozo de cielo la foto tendría el mismo significado, no se alteraría para nada el concepto, de ahí mi puesta en duda sobre que esos elementos sean fundamentales en la construcción de la foto y en su lectura.
EliminarPor otra parte pienso que el dinamismo lo aporta la propia inclinación de la foto y por supuesto el paso de la muchacha con su melena al viento.
Disculpa mis reflexiones que desde luego no pretenden sentar cátedra sino simplemente expresar mi relación con tu fotografía.
Y gracias a ti por compartir :)
Por favor, no pidas disculpas por opinar, hombre, solo faltaría. Para eso compartimos las fotos, para disfrutar y aprender un poco entre todos, siempre desde la educación, el respeto y el buen rollo, como tú haces.
EliminarUna composición de 10, es una foto que atrapa, por la luz, por la composición y por el color.
ResponderEliminarUn abrazo
escenarios que nos regala la ciudad
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