sábado, 28 de febrero de 2009

Rampa de compresión

Candás- Asturias


Tras un paseo prolongado por la superficie del mar, la inmersión a las profundidades de la tierra debe realizarse de forma lenta y progresiva para evitar el conocido síndrome de compresión: hemos de dar tiempo a que el oxígeno abandone ordenadamente nuestros tejidos y se reduzca de nuevo nuestra capacidad pulmonar a los niveles mínimos habituales, pues de lo contrario corremos el riesgo de que se formen burbujas en nuestro flujo sanguíneo y sufriremos síntomas similares a los de una intensa resaca. Deben utilizarse por tanto las rampas de compresión y huir de escaleras y saltos al vacío.

miércoles, 25 de febrero de 2009

Batería baja


Hace ya algunos años que Pikachu, el pokemon eléctrico por excelencia y mascota oficial de la popular serie de anime y videojuegos, alcanzó su esplendor y máxima popularidad en todo el mundo, hasta el punto de que llegó a considerarse como la respuesta japonesa al todopoderoso Mickey Mouse, o sea, una especie de gran esperanza blanca pero en estilo nipón. Lo cierto es que actualmente ni Pikachu ni Mickey atraviesan su mejor momento. Pikachu despliega una energía muy disminuída, sus ataques se han convertido en repliegues, tiene la tensión baja e incluso hay quien dice que ha protagonizado varios intentos de autoelectrocución. En cuanto al ratón Mickey cada vez sus apariciones son más escasas: parece ser que ha empeñado su disfraz de aprendiz de brujo y que se le está poniendo voz cavernosa. Total, que los dibujos andan bastante desanimados. Estamos necesitando un relevo. Anímense ustedes, por favor.

domingo, 22 de febrero de 2009

Reposapiés

Parque San Francisco - Oviedo





Nada más sentarme en este banco, el mp3 empezó a fallar: la música tenía un chisporroteo como de vinilo machacado y la voz de la cantante sonaba tan lejana como si saliera de las profundidades de un gramófono. Abandoné el banco creyendo que estaría expuesto a algún tipo de interferencia magnética. Pero nada. Diana Krall sigue pareciendo Billie Holliday. Me dicen en la tienda que no sale a cuenta arreglar estos aparatos. Pero me da pena tirarlo. Y además creo que ya me voy acostumbrando.

jueves, 19 de febrero de 2009

Erótica rural


El tema de esta foto es bien explícito. La tensión entre los elementos no deja lugar a dudas. Lo difícil, sin embargo, es determinar qué papel corresponde a cada uno.

Muchas veces he oído preguntar por el sexo de los ángeles. En cambio, no recuerdo ninguna ocasión en la que se haya indagado acerca del sexo de las nubes. Se habla, es cierto, de nubes preñadas, pero también se alude a menudo a su acción fertilizante. Y en cuanto a sus formas, es precisamente la indefinición cambiante su principal característica. No conozco a ningún sexador de nubes, pero si lo hubiera ¿por dónde palparía?

Ya en la parte izquierda de la imagen, tenemos cueros ceñidos, negro satinado, prendas caladas, elásticos y turgencias. Por cierto, qué palabra ésta, turgencia, siempre esperando a que soltemos la hebilla de la t. Pero desde luego no seré yo quien aventure un pronóstico acerca de qué clase de volumen se oculta pujante tras la malla. Allá cada uno con sus “elubricaciones”.

El caso es que tarde o temprano, bajo el hechizo y el hachazo de una turbonada, se rasgará el plástico y se desatarán las ligaduras. Quedará entonces enredada en las ramas de aquel árbol la fragancia fermentada del invierno, y ya no importará quién era quién. Todo será viento.

lunes, 16 de febrero de 2009

La ruta de la arena

Playa de San Lorenzo - Gijón


Tras los últimos temporales se nos ha llevado la mar la arena de las playas. Ha dejado al descubierto un sustrato rocoso mezclado con cimientos que ya no reconocemos como nuestros. Dicen los expertos que no hay cuidado, que la devolverá antes del verano. Reconforta saber que aún concedemos préstamos, y sin más aval que la fe en el eterno retorno. Cuál sea el destino de todas esas toneladas arenosas es cosa de la mar. Si envuelve con ella los cuerpos de los desaparecidos o si rellena las conchas vacías de sus ojos no es asunto nuestro. Sea como sea, confiamos: volverá la arena y vendrá fertilizada, un humus salado y oscuro en el que plantaremos nuestras toallas a rayas y brotarán las sombrillas de colores como si fuera la misma arena del verano pasado, como si eso fuera posible.

viernes, 13 de febrero de 2009

Metáfora del parque

Parque San Francisco - Oviedo


-Nada. Que a este paso llego tarde, seguro.

(Es lo que tienen los parques. No llevan a ningún sitio y todas las citas se retrasan).

martes, 10 de febrero de 2009

Alicatado en mármol


Por culpa de un par de vinos tomados a contrapelo antes de comer, la siesta estaba resultándome de lo más desasosegante: cada vez que intentaba desconectarse la conciencia, el estómago hacía una pirueta, y claro, así no había forma de entregarse al abrazo del sillón orejero. Abrí los ojos. Afuera corrían las nubes. Bella tarde para despejarse y de paso saldar alguna cuenta pendiente. Resulta que apenas hago fotos del lugar donde vivo. Cuestión de pudor, supongo. Así que me fui, cámara en bandolera, al barrio más alto de Candás: el cementerio. Cinco minutos faltaban para el cierre cuando llegué. No sé por qué pensaba yo que el cementerio tendría horario comercial, pero no. Cierran a las seis. Entré de todos modos, buscando con los ojos algún visitante o empleado municipal que me sirviera de referencia, y con los oídos puestos en todo momento en el ruido de la cancela. Anduve apenas un cuarto de hora por los pasillos arriba y abajo, tres o cuatro fotos semiautomáticas y una áspera sensación de estanterías vacías, de liquidación por falta de existencias. Ya de lejos vislumbré el portón cerrado. Comprobé in situ: recio candado. No sé por qué pensaba yo también que el cementerio tendría vigilante, como cualquier otro museo, pero no. Aquí, se supone, ya todos somos mayorcitos. Busqué pues un nicho asequible a la escalada para echar un vistazo por encima de la tapia y calcular mis posibilidades. Mientras trataba de coordinar pies y manos, pensé en Ripley y su inefable modus operandi: qué momento este para ser glosado con su humor cercano y su ironía. Al fondo, muy al fondo, en la parte nueva del camposanto, encontré una escalera de tijera, anoréxica y echa un manojo de nervios. Desde su inestable cima me pareció que la altura exterior era apta para el aterrizaje. Salté. Ya del otro lado me palpé y comprobé que todo estaba en su sitio. Solo algún que otro rasguño en la palma de las manos me impedían aplaudirme. El caso es que lejos de sentirme aliviado, me di cuenta de mi enorme estupidez: acababa de echar por la borda junto con mi persona al menos media hora de preciosa luz en un cementerio para mi solito. Es cierto que puedo volver cualquier otro día, pero ni la luz ni la gracia de las nubes serán ya las mismas. Y además no conviene tentar demasiado a la suerte. He oído decir que las tapias de los cementerios ganan altura conforme el sol se oculta.

sábado, 7 de febrero de 2009

Redes




Cielo: cartografía imaginaria de la tierra.

Tierra: cartografía matemática del cielo.

Cartografía: Esperanza en lo inamovible.

miércoles, 4 de febrero de 2009

Viaducto

Calle Fontán - Oviedo


Puente: estructura que transforma en vacío el espacio existente entre dos puntos.

Vacío: ilusión óptica que nos induce a creer que pisamos tierra firme.

Tierra firme: punto imaginario a partir del cual se levanta un puente.

domingo, 1 de febrero de 2009

Vía rápida


Escalera: estructura que sirve de soporte al pasamanos.
Pasamanos: listón de metal o madera sobre el cual es posible descender una pendiente sin peligro de traspiés.

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