Mirador de El Sitio - Nazaré
No pensábamos llegar tan lejos, pero al final nos decidimos.
Era lunes, pero allí resultó ser día festivo.
Había mujeres mayores que vestían como hace cien años, pero alquilaban habitaciones en varios idiomas y llevaban prendida la autorización municipal.
Las calles del barrio pescador estaban trazadas en cuadrículas perfectas, pero aún así logramos perdernos sin esfuerzo.
Buscamos la calle que condujera a la plaza del pueblo, pero la calle era un vagón que ascendía por raíles un acantilado.
En la plaza había una banda de música, pero jugaban un partido de fútbol a chaqueta quitada en medio de gran expectación.
Entramos en la iglesia suponiéndole el silencio y algo de frescor, pero encontramos oraciones dichas en voz alta y el calor que desprendían tantas heridas invisibles.
La banda de música empezó a tocar, pero tocaba rithm & blues a una velocidad del demonio y los lugareños escuchaban inmóviles y atentos, con el máximo respeto.
Nos dimos un baño en las frías aguas del Atlántico, pero eran cálidas y tranquilas como las de un mar interior.
Ya con la noche bien entrada nos fuimos de Nazaré, pero no del todo.
Era lunes, pero allí resultó ser día festivo.
Había mujeres mayores que vestían como hace cien años, pero alquilaban habitaciones en varios idiomas y llevaban prendida la autorización municipal.
Las calles del barrio pescador estaban trazadas en cuadrículas perfectas, pero aún así logramos perdernos sin esfuerzo.
Buscamos la calle que condujera a la plaza del pueblo, pero la calle era un vagón que ascendía por raíles un acantilado.
En la plaza había una banda de música, pero jugaban un partido de fútbol a chaqueta quitada en medio de gran expectación.
Entramos en la iglesia suponiéndole el silencio y algo de frescor, pero encontramos oraciones dichas en voz alta y el calor que desprendían tantas heridas invisibles.
La banda de música empezó a tocar, pero tocaba rithm & blues a una velocidad del demonio y los lugareños escuchaban inmóviles y atentos, con el máximo respeto.
Nos dimos un baño en las frías aguas del Atlántico, pero eran cálidas y tranquilas como las de un mar interior.
Ya con la noche bien entrada nos fuimos de Nazaré, pero no del todo.
Pues mira, de todos esos sin sentidos que has mencionado, el que menos me creo es el de las aguas cálidas de Nazaré. En mis tiempos mozos disfruté de un baño en dichas aguas y tan sólo recuerdo una experiencia tan solidificadora para la piel y era en una poza de un río de montaña ;-)
ResponderEliminar¡Qué azul tan bello y qué mirador tan privilegiado!
Sigo pensando que Portugal te ha calado. Tu ritmo es más pausado y se nota una cierta nostalgia lugareña muy evocadora.El texto hace que apetezca viajar a Nazaré para revivir sus contradicciones. Y esa estupenda imagen del atlántico, tan azul e inmenso, produce cierta expectación dentro de la pausa de los músicos. Que el rihm and blues requiere su tiempo.
ResponderEliminarUna bonita experiencia la tuya por Portugal. Y la foto una maravilla. Deben haber muy buenas vistas desde ese mirador. Claro que no todos jugaban al futbol, los músicos de la foto...
ResponderEliminartu descripción lleva a pensar en que un día...un día, Nazaré.
ResponderEliminarPero sin querer, Xuan, me has hecho recordar a mis abuelos; cuando era niña siempre decían "vamos a Nazaret" y era todo un revuelo hasta cuando tuve consciencia y descubrí que ese Nazaret era una calle en un pequeño pueblo muy tranquilo, casi dormido...
un abrazo,
Muy bonita, el marco inigualable y los dos musicos mirando a ese horizonte que se ve al fondo.
ResponderEliminarGenial el encuadre y la riqueza de colores.
Un saludo.
A mi tambien me habria encantado asomarme al mirador. Viste la foto a la espalda de los observadores y no desde donde estaban ellos, muy buena
ResponderEliminarsaludos brujos
Un relato genial. Al final tendre que ir a Portugal con la buena propaganda que le haceis todos. Por las fotos que muestras parece un lugar precioso. Un disparo muy bien buscado, coincido con Santi en la composición.
ResponderEliminarUn abrazo
Más bien parece un lugar que no esta en las guías y que alguien te dijo que era Nazaré.
ResponderEliminarTanto es así que ha quedado dentro de tí mientras el pueblo verdadero ve pasar a los miles de turistas.
Una diagonal blanca en zig-zag recorre de izquierda a derecha y de abajo hacia arriba la escena, sin embargo en el centro esos personajes te obligan a detener el recorrido de la diagonal i mirar a donde ellos miran: al mar.
ResponderEliminarMe gusta. Felicidades
Y, sobre todo, cómo has atrapado la vida en ese texto. Y, en la foto, la pausa de toda acción: una historia de dos músicos y un horizonte de mar.
ResponderEliminarMis ojos disfrutan primero con las vistas, el mar, la playa allá abajo, pero llevados por esta nueva ley de los tercios acaban en los músicos, en los gestos que me cuentan su historia, ya huérfana de música, y es cuando veo otra foto a espaldas de él, y pienso que estoy viendo varias fotos muy buenas haciendo una y claramente las intersecciones, como aquellos diagramas de la niñez, que siguen contando la historia.
ResponderEliminarMe ha hipnotizado.
Tienes fotos de Maestro, te seguiré.
No todos jugaron al futbol.Estos prefirieron la luz para combatir la saudade ya cercana.
ResponderEliminarAsi a vote pronto pense, vaya se parece a Naraze, y mira por donde es asi, hace muchos años fui alli, en el viejo R12.
ResponderEliminarsaludos
Qué pasada de vista!!!
ResponderEliminarMe recuerda a las islas griegas, sobretodo a Santorini....
Ay, qué recuerdos...
Muy buena idea la de hacer la perspectiva de otros la tuya, la nuestra... Mirar a traves de otros nos acerca a ellos...
ResponderEliminarNo se en que zona portugusa está ese mirador, ese mar... pero muy docilmente me acercaría y metería los piecitos en esa agua al ritmos de la banda del pueblo...
Un beso!!!
Qué línea del horizonte más elevada: da vértigo. Estupendo y original. Aunque una cosa: por mucha poesía que le pongas, esas aguas no hay quien las caliente.
ResponderEliminar¿Y no te escuecen los ojos de contemplar tanta belleza?
ResponderEliminarMe entran ganas de ir del todo
ResponderEliminarHoy es mi peque quien te comenta en tu última entrada. ¡ohhhhhhhh que bonita¡¡¡¡ ¡¡¡¡son todas muy bonitas en ésta página¡¡¡¡ jaja, esa ha sido la expresión de mi hijo cuando ha visto tu blog.
ResponderEliminarbesitos xuan.
Hola Xuan, el encuadre que le has dado con los músicos viendo el mar, el instumento músical al lado ... describe la historia del relato.
ResponderEliminarUn Abrazo
Bonito encuadre con los musicos contemplando ese maravilloso paisaje. Me gusta el trozito de playa que se ve, dando perspectiva de la altura del mirador.
ResponderEliminarUn Saludo
Me gusta mucho la frase con la que terminas esta entrada. y la foto esta llena de contrastes de luz y de tonos, es muy original y ni quiero pensar en la vista hacia abajo desde donde mira la pareja.
ResponderEliminar... y yo odio fútbol, fijate!
ResponderEliminarHola Juan,
perdona,que en las ultimas semanas .... ay mi trabajo, espero que entiendas.
Tu ultimas fotos estan muy buenas, tienes un sentido y una vista muy especial por los mentos sensibles. Me encantan!
Un saludo!
Caro amigo, bela fotografia da Nazaré...Espectacular...
ResponderEliminarUm abraço