Es lo que tienen los fantasmas, que lo suyo es aparecer y como aparecidos llegan precisamente cuando menos se los espera. A este le negué su oportunidad allá en febrero por una razón de peso que ya no recuerdo. Ahora viene y con gran crujir de telarañas me reclama seis meses de existencia. Yo le digo que no lo reconozco, que aquella noche en aquella plaza había mucha gente y muchas cámaras, que cualquiera pudo hacerle esta fotografía. Pero el insiste en mi autoría y afirma que es muy cómodo apretar el botoncito y luego si te he visto no me acuerdo, que hay que apechugar con las responsabilidades y no esconder la cabeza debajo del trípode. Trato de aparentar calma y le replico que ahorrándole seis meses de existencia también le he evitado seis meses de olvido. Pero él que no, que ya verá él lo que hace con su olvido, que tal vez un día se coticen al alza los espectros, igual que un día los expertos fueron dioses y hoy se acurrucan en oficinas en penumbra. Por cortar de alguna forma esta conversación absurda le propongo un trato: le concedo una entrada con todos los honores y con la máxima difusión posible, pero únicamente por un día, para después borrar no solo la entrada sino hasta el archivo que lo contiene en el disco duro de mi ordenador. Me dice que el cuento del día de fama ya se lo sabe y que el de Fausto también, pero que aun así acepta porque reconoce que eso es todo a lo que puede aspirar un espectro como él. Pero que si por azar lograra durar más allá de las veinticuatro horas, entonces no solo deberé indultarlo sino que además me comprometo a escribir una historia susceptible de ser llevada a la pantalla en la que él será el protagonista indiscutible. Le digo que sí, naturalmente. ¿No os parece enternecedora la ingenuidad de estos fantasmas?
miércoles, 5 de agosto de 2009
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Yo creo que esté fantasma sabe más de lo que aparenta y cree que eres capaz de escribirle esa historia como protagonista y más, de hecho ya te ha sacado una historia, ten cuidado que aunque no sea vampiro, ya se esta aprobechando de tí.
ResponderEliminarGenial. Ambos.
ResponderEliminarA veces se empeñan por seguir siendo participes de nuestro presente. Y eso que en su momento se les deja muy claro que su papel es de acompañante, como sumo un figurante más de nuestra existencia. Pero por lo que veo amigo Xuan, aparte de revoltoso y travieso, este te ha salido respondón.
ResponderEliminar¿Será cosa que en febrero tienden a ser así?
ya te veo escribiendo el guión cinematofráfico... y de director de fotografía.
ResponderEliminarespero ver pronto a la aparecida co- protagonista, o se tratará de una modelo anoréxica de cuerpo sin sustancia y alma triste?
ResponderEliminarFantástica foto y mejor pie de foto. Lo tuyo son las artes, ya sean plasmadas en imágenes o en palabras. Besos!
ResponderEliminar¡Genial, de verdad! Me gusta y mucho la foto pero mucho más tu ameno y divertido texto. Ah¡ voto por el indulto. Aunque el fantasma haya pecado de ingenuo, bien se merece un poco de fama perdurable.
ResponderEliminarSaludos
Has escapado bien por esta vez, ja, ja!
ResponderEliminarLe das buen contenido textual a tus fotos, ello es más importante de lo que pueda parecer.
lo que pesan los fantasmas del pasado... y encima con exigencias. Yo no habría negociado, hubiera aceptado además, por ese bigote de Guardia Civil que lo hace aún más pernicioso.
ResponderEliminarLo malo es que todos andamos arrastrando así nuestro espectro por la vida...
ResponderEliminarYo también hubiera insistido en estar asomado, reflejado en tu blog, será un espectro, pero no es tonto, y sabe de la calidad que rodea cuanto tocas , con tu cámara, con tu palabra....magia pura , y éso les gusta mucho a los espectros.
ResponderEliminarMuy buena la foto, pero a mí me pierde, me entusiasma cómo escribes.
Para cuándo un libro, una historia de las que cuentas, con algunas líneas más, claro? Se vendería como rosquillas, seguro.
Un abrazo, grande,grande, Xuan.
Enrique.
El texto y la foto están estupendos.
ResponderEliminarEres genial.
Besos.
esto es la mas pura expresion del movimiento fotografiado, una inusual sensacion de velocidad, me gustó el efecto, saludos
ResponderEliminarperdon por mi desidia y la cantidad de tiempo que he dejado pasar
saludos
Me parece que tendrias que darle una oportunidad, no creo que sea tan malo.
ResponderEliminaren la foto salio muy bien.
Saludos.
Fantasmas q reaparaecen por su propia fama y reclaman q nos hagamos cargo del pasado q no fue basándose en la utópica idea de la cotización en alza de los espectros, como decís.
ResponderEliminarYo...pienso, evalúo y comparto un momento con mi fantasma, como en El lado oscuro del corazón, de Eliseo Subiela. Luego decido q presionaré el botón...¿pero cuál? (¿El de la cama o el de la cámara?)
(Tienen q ver la película)
Saludos argentinos.
Genial tanto la foto como el comentario
ResponderEliminarSaludos y buen finde!
Tengo la impresión de que este fantasma se queda, le ha pillado el gustillo a esto de internet, será por 1ue le gusta estar rodeado de buenas fotos y mejores comentarios, afemás, dos no riñen cuando uno no quiere.
ResponderEliminarlo que se hace por un minuto de protagonismo jjajajja
ResponderEliminarExcelente captura !
ResponderEliminarLos espectros nunca tuvieron una estructura ósea clara; mas bien difusa. En quien no sé si creer como espectro es a los expertos del BBVA del fondo: ellos sí saben mantenerte más de un día. Te hipotecan físicamente y te mantienen como espectro sin olvido.
ResponderEliminarGenial tus revueltas fantasmales.
Me gusto mucho, exelente foto. Saludos
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