…y algunas veces la fotografía como un atajo hacia el
recuerdo, pero no en el sentido de ser un instrumento con el que evocar el
tiempo ido, al modo de una vieja canción o de un aroma a partir del cual
podríamos reconstruir un mundo por completo, sino como el ardid que nos ahorre
precisamente todo ese tiempo y olvido necesarios para que el detalle alcance su
eficacia recuperadora. Es decir, no un pasaje hacia el lugar donde habita la
memoria sino hacia aquel otro en el que trataremos de recuperarla. Que la fotografía
me traiga la emoción de lo antiguo que se oculta en lo que acaba de suceder
hace un segundo. Que me devuelva la intensidad con que no supe vivirlo. La
fotografía, en fin, no como rememoración sino como anticipación de lo pasado...
A punto de acabar el día descubro tu entrada y es un atajo que me lleva a ciertas reflexiones, en las que, luego, probablemente me demore sin prisas. Y cómo me gusta la niña jugando de espaldas al grafiti - anticipo de lo que algún día será su pasado, como nos ha pasado a todos: "difícil olvidarte"-. pero menos mal, ella aún no lo sabe.
ResponderEliminarEsos instantes que quedan "quietos" en el tiempo, tienen el don de poderse visionar despertando las dudas aparentes que provoca el olvido.
ResponderEliminarEl olvido efímero ante una realidad visual como la que muestras.
Un abrazo
el olvido es cada vez más dificil, se amontona en el disco de mi computadora...
ResponderEliminarMe encanta! excelente fotografía!
ResponderEliminarRecordé unos versos de Unamuno que dicen:
"...nocturno el río de las horas fluye
desde su manantial que es el mañana
eterno..."
Desde ese mañana, nos llegan las palabras del grafiti... y las escaleras, como las diferentes etapas hacia el futuro, o desde el futuro hasta los recuerdos de la infancia.
Fantástica metáfora del tiempo en esta foto!
Un abrazo
La fotografía es un instrumento, casi para todo.
ResponderEliminarun pasado presente o un presente efimero. la foto tiene todo el sabor de lo antiguo. La gracia y virtud de aquellos olores que como dices nos transportan en el tiempo a donde quiera que sea, a mi me ocurre con cierta frecuencia.
ResponderEliminarla foto fenomenal. un abrazo
Una foto genial, con todo lujo de detalles, la niña se tapa el ojo, nos para con los gestos de la mano, el mensaje que no hacía falta y el lugar, con solera, añejo, con mil historias vividas.
ResponderEliminarEnhorabuena, parece imposible, pero te has superado a ti mismo.
Abrazos.
Me gusta tu blog y tus reflexiones, acabo de abrir el mio. Es muy interesante
ResponderEliminarComo aquel personaje en "Memento", que necesitaba de la fotografía para anticiparse, también, al presente. El lugar es muy fotogénico (cuanta belleza en el abandono y el deterioro, tal vez porque retrate en esencia esta sociedad), pero la niña aporta todo el sentido a la toma que cuenta más que el puro mensaje.
ResponderEliminarUn abrazo
Excelente, Xuan, el texto y la fotografía.
ResponderEliminarExcelente tu.
La fotografía como alma en imágenes, sin duda.
ResponderEliminarLa pureza de la infancia delante de la memoria, tan triste casi siempre.
ResponderEliminarUn abrazo, Xuan
Debo estar imbuida por el pesimismo actual, pero verla dando el alto, mirar las escaleras, que dan paso al futuro, cerradas por esa verja junto con el texto escrito en la pared me ha llenado de desasosiego, yo que venía revitalizada de la foto anterior, más bien del texto anterior, tendré que volver a la luminosidad para levantar cabeza. Pero la foto tiene mucha fuerza. ¿Proviene de la niña o es todo el conjunto?
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